Coaching: la profesión del futuro

Learning process

Coaching es un término que comenzó a utilizarse recientemente. La realidad es que no tiene una sola definición, pero todas las interpretaciones disponen de numerosos puntos en común. En esta ocasión en especial, trataremos de explicar de mejor forma posible de qué se trata esta novedosa profesión, la cual se perfila como una actividad protagónica en el futuro.

En primer lugar es fundamental destacar que la esencia del coaching tiene que ver con liberar el potencial de las personas, con el fin de que éstas lleven su rendimiento al máximo. Esta profesión no consiste en enseñar, sino en ayudar a aprender. El término en cuestión surge a partir del concepto del deporte en general («coach» significa «entrenador»en inglés). A pesar de lo que pueda sugerir esta palabra en un primer momento, la tarea primordial de un coach de esta índole es la de funcionar como un catalizador de conciencia y no la de instruir, enseñar o transmitir conocimientos.

Los clientes del coaching (denominados frecuentemente «coachees») recurren a los coach con el fin de que los acompañen en el proceso de cambio o mejora que pretenden realizar. Estos profesionales jamás brindan soluciones, sino que intervienen para que las propias personas sean las que encuentren los remedios a sus conflictos dentro de sí mismas. Es esencial tener en mente que esta actividad tiene como principal fin el de auxiliar a quien más lo necesite a que saque lo mejor de sí en relación con lo que hace o desea hacer. La idea es aprovechar al máximo todas las habilidades y recursos con las que cuenta el individuo.

Es importante hacer hincapié en que existen numerosas formas de coaching, como por ejemplo el filosófico, el integrativo, el estructural, el ejecutivo, el de vida, el de la variedad, el coactivo, el coercitivo, el sistémico, el empresarial o el deportivo. Hoy en día es posible hallar múltiples escuelas que se dedican especialmente a enseñar este oficio de los modos más diversos, como por ejemplo Motivat. Quienes desean aprender este oficio y disponen de horarios ajustados que no les permiten adaptarse a cualquier itinerario, pueden hacerlo fácilmente mediante cursos que se ofrecen en Internet, de un modo tan rápido como sencillo. Se trata del coaching online, que se caracteriza por brindar a los alumnos total libertad y flexibilidad. Por otro lado, las enseñanzas de esta índole también se separan según su complejidad, habiendo cursos de coaching básicos y cursos de coaching completo. Aquellos individuos que no tienen demasiado tiempo o viven demasiado lejos de las escuelas, pueden seleccionar los cursos de coaching intensivo. Éstos duran tan sólo seis días, en los que se cursan unas diez horas cada jornada.

Por último, es primordial tener en mente que un buen coach es un excelente observador, sabe cómo lograr que su cliente tome conciencia, es capaz de ayudar a que su cliente determine sus objetivos, puede actuar de forma sostenida en el tiempo, tiene la capacidad de determinar si el cliente está cerca o lejos de los fines planteados, puede asumir un compromiso y es capaz de motivar al máximo a su oyente.